Ecuador está en América del Sur, sobre la línea ecuatorial, entre el Pacífico y las montañas más altas de los Andes, con la selva en medio. En este País la riqueza se encuentra en manos de unos pocos. Para todos los demás solo quedan las migas… hasta que una catastrofe natural no se las lleva también.
P. Giancarlo, director general del Messaggero di Sant’Antonio, explica: “En los últimos años he tenido la oportunidad de visitar muchas misiones, de conocer la pobreza de medio mundo, pero las condiciones que he encontrado en la selva ecuatoriana, en Jama, en Las palmitas… no tienen comparación. Aquí la miseria destroza el alma, te empobrece dentro, hasta sacarte el deseo de mejorarte. Lo entiendes por la mirada apagada de los jóvenes, que no tiene ningún sueño, perspectiva y, quizás, ya no tienen esperanza”.
El nuevo futuro nace en la familia
¿De dónde puede llegar la salvación de estas personas? ¡De la familia! Sí, precisamente de la familia, la más pequeña comunidad natural, que sobrevive en todas partes y se regenera siempre, con la fuerza del amor. Pero para existir y dar frutos, la familia necesita una casa. Por muy pobre y esencial que sea, la casa es el espacio vital dentro del cual maduran los afectos, las ideas y también las aspiraciones más hermosas.
La casa de la esperanza
Nosotros, los frailes de San Antonio, nos hemos comprometido en realizar algunas pequeñas casas, para donar a las familias pobres que viven en tres poblados en la selva de Ecuador. Se trata de estructuras muy simples, con la planta baja de ladrillos y la parte superior en bambú, un material muy utilizado en estos lugares porque es barato y funcional.
Padre Walter, un sacerdote misionero, seguirá las obras, pero sobre todo se ocupará de las familias que irán a vivir a esas casas. Junto a sor Miriam ya está haciendo auténticos milagros para devolver la esperanza a todos ellos.
Para la fiesta del 13 de junio ayúdanos a realizar las casitas de bambú para los más pobres que viven en la selva de Ecuador: ¡con tu generosidad harás nacer la esperanza a quien tanto lo necesita! Gracias de todo corazón.
Con tu ayuda puedes donar:
bambú para las paredes
mesa y sillas para la casa
camas para los niños
ladrillo para la planta baja
materiales para el tejado de la casa
una casita